Te extraño desde mañana y más que ayer, siento que pierdo la cabeza lentamente, me estoy volviendo loca y ya la perdí.
Esos abrazos bajo las sabanas o esas caricias bajo la mesa, esas miradas cómplices que nos dábamos a diario al notar nuestra falta de madurez nos vuelve amantes, amantes de la fantasía. Nuestro éxtasis aumentaba al tocar nuestras manos y con solo rosar nuestros labios ya venían los de moralidad a llamar nuestra atención.
Las tardes se volvieron semanas y las semanas meses observando el atardecer esperando tu llegada entre llanto y llanto, recuerdo mirar las hojas de los árboles que pedían a gritos mi compañía como la fiel amante que un día les fui solo que ahora era otro el dueño de mi tiempo.
Un día llegaste solo así, solo llegaste y te atreviste a enamorarme sin pedir permiso, solo así y ya. Responde, ¿quién te dio el permiso para ser mi completo dueño? solo lo eres, solo te convertiste en todo. Solo así.
Las tardes se volvieron semanas y las semanas meses observando el atardecer esperando tu llegada entre llanto y llanto, recuerdo mirar las hojas de los árboles que pedían a gritos mi compañía como la fiel amante que un día les fui solo que ahora era otro el dueño de mi tiempo.
Un día llegaste solo así, solo llegaste y te atreviste a enamorarme sin pedir permiso, solo así y ya. Responde, ¿quién te dio el permiso para ser mi completo dueño? solo lo eres, solo te convertiste en todo. Solo así.